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Inversión en telecom: la paradoja

IDET dio a conocer un estudio en el que analizamos los montos de inversión en el sector telecomunicaciones desde la aprobación de la reforma constitucional en el 2013.

2018-09-19

El Instituto de Derecho de las Telecomunicaciones (Idet), que me honro en presidir, dio a conocer un estudio en el que analizamos los montos de inversión en el sector telecomunicaciones desde la aprobación de la reforma constitucional en el 2013 hasta lo reportado por el presidente Peña Nieto en su 6º Informe de Gobierno.

Si bien el agregado total de inversión privada desde la reforma es sin duda positivo (329,000 millones de pesos), llama la atención la drástica reducción en el promedio de las inversiones del 2016 al 2017: la inversión privada total pasó de 87,000 millones en el 2016 a 63,000 millones en el 2017; es decir, una disminución de casi 28% de un año al otro. Una disminución tan drástica en la inversión privada no debe pasar inadvertida, sobre todo, si consideramos que la inversión privada en telecomunicaciones representa 97.1% del total de las inversiones; esto es, el sector público invierte menos de 3% de la inversión total en telecomunicaciones.

La contracción de 28% en las inversiones durante el 2017 llevó al Idet a hacer un análisis del comportamiento de los operadores y sus inversiones en México. La primer conclusión a la que llegamos fue que durante el 2017, el agente preponderante en telecomunicaciones (América Móvil-Telmex-Telcel) redujo sus inversiones en comparación al año anterior en 46.3 por ciento. La drástica reducción en las inversiones del preponderante explica cabalmente la reducción en el promedio de las inversiones totales, pero el análisis arroja otras conclusiones interesantes: la inversión de los competidores de América Móvil representó en el 2017 casi 70% de la inversión total, mientras que, durante el mismo periodo, América Móvil recibió el 60% de los ingresos totales del sector, frente a 40% dividido entre todos sus competidores.

Aún más, comparando las propias operaciones de América Móvil en otros países con su operación en México, encontramos que en aquellos países en los que enfrenta un entorno realmente competitivo, la empresa invierte mucho más de lo que invierte en México, donde su altísima concentración de mercado le permite seguir recibiendo ingresos extraordinarios con una inversión reducida. Así es que mientras en México sólo invierte 9% de sus ingresos, en Chile y Perú invierte 16%, en Colombia 17% y en Brasil 21 por ciento. Hay otro dato interesante. A partir de la reforma constitucional en telecomunicaciones del 2013, América Móvil ha tirado drásticamente su inversión en dos ocasiones: en el 2014, cuando el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) lo declaró agente preponderante en telecomunicaciones y entró en vigor la nueva Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, que le impuso medidas asimétricas para restringir su poder de mercado y en el 2017, cuando el IFT ordenó la separación funcional entre los servicios mayoristas y minoristas de Telmex. Es decir, siempre que se toma una decisión legal o regulatoria para acotar su poder de mercado, el preponderante tira sus inversiones para argüir que la reforma ha fracasado y, por tanto, se le debe liberar de la regulación asimétrica que deriva de su condición de preponderante.

La paradoja es que, en efecto, hay una relación directa entre la regulación asimétrica del preponderante y la disminución de sus inversiones en México, y uno podría pensar que si se le elimina o suaviza la regulación asimétrica, éste volvería a invertir en México. Sin embargo, su comportamiento en los otros países en que opera demuestra todo lo contrario: en aquellos mercados en los que enfrenta una verdadera competencia que le obliga a salir de su zona de confort, América Móvil invierte el doble de lo que invierte en México, a pesar de que sus ingresos en dichos países son inferiores a las utilidades que le generan Telmex y Telcel. Es decir, un análisis objetivo del comportamiento de las inversiones de América Móvil nos llevaría a concluir que es, precisamente, a través de la implementación efectiva de la regulación asimétrica y el fomento a la competencia como se puede detonar la inversión, tanto del preponderante como de sus competidores. El hecho de que América Móvil reduzca sus inversiones cuando algo no le gusta sólo demuestra que está muy cómodo con su situación en México.

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