Javier Orozco/ Milenio
Mientras se esperaba la ratificación de los nuevos comisionados del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel), la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y MVS negociaban el espectro de la banda de 2.5 GHz.
Lo que surge como una nota periodística, que al día de hoy ni la SCT ni MVS han rechazado o desmentido, los 11 operadores que tienen concesiones en esa frecuencia, entre ellos MVS, y la SCT firmaron un acuerdo en el que las empresas conservarán 60 megaherz MHz), 32 por ciento del total de 190 MHz que componen a la frecuencia, mientras que el Estado recuperará 130 MHz, 68 por ciento restante.
Esto debe llevar a una investigación de los servidores públicos de SCT que intervinieron, quienes se aprovecharon del régimen transitorio de la reforma constitucional para refrendar títulos de concesión horas antes de la constitución del Ifetel.
Hacer alusión a MVS, perteneciente a la familia Vargas, es hablar de una serie de historias de crisis y conflictos caracterizados por la presión y el chantaje.
Si MVS piensa que con este acuerdo espurio (como dice el clásico) le representa la oportunidad de entrar a competir al mundo de la banda ancha, o una de dos hizo mal sus cálculos o quizá su aliado Carlos Slim los patrocine.
Primero tiene el pago del refrendo, donde tiene diferendo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que valuó en 0.105 dólares por MHz/pop nacional, mientras MVS ofrecía 0.4 centavos de dólar; si a esto le sumamos que en el paquete económico de 2014 se establece una reforma a la Ley Federal de Derechos que propone un nuevo mecanismo para el pago por el uso del espectro, MVS requiere liquidez económica.
Esto último no creo que lo pueda superar con los miles de suscriptores que tiene en su sistema de tv por microondas, el que debe seguir prestando; además, al haber perdido más de 120 MHz de la banda 2.5, su negocio Wi-Max, con Clearwire e Intel, difícilmente se va a concretar.
Mientras tanto, la sociedad ha quedado al margen de información oficial y al Ifetel lo madrugaron, pero hoy legalmente debe tomar mando del asunto.
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